jueves, diciembre 04, 2014

Perdiendo cabello, ganando valor...

Empiezo esto unos minutos antes de mi cumpleaños número 30, hay una bolsa en la basura que contiene a lo mucho 50 gramos de cabello que acabo de quitarme de encima, para aquellos que tanto insisten en mis entradas como salidas ya podrán aumentar la broma. La verdad es que al ver esa bolsita comprobé el valor y el peso que tiene la vanidad en mí, sin mencionar la necesidad de aceptación de los otros y el miedo que provoca la resignación de perderlo con el paso de la edad.


Por eso hoy 4 de diciembre de 2014, empiezo mi ritual afirmando que es cuestión de coraje perder lo que a uno le da seguridad, es repetirme que la belleza viene de dentro, que lo externo es momentáneo y todo tiene fecha de caducidad, no es que esté a la expectativa de perder, más bien mi propósito es vivir mejor abrazando y aprovechando todo lo que pueda al máximo.


Mi abuela no dejó ir solo su pelo, dejó ir el coraje, la tristeza y solo así le crecieron la salud y el amor por la vida que a pesar de no ser perfecta ella decidió seguir en ella. Yo dejo ir mi cabello y la vanidad para crecer en seguridad porque al final todo empieza desde dentro.


El año que acabo de pasar lo llamé un año aburrido, no hubo grandes amores, no hubo viajes que me llevaran a la tan anhelada Italia, no tuve una enfermedad que me hiciera valorar la vida de manera abrupta, no, no hubo nada de eso, en cambio tuve un año aburrido donde para encontrar el sabor y la diversión tuve que darme a la tarea de vivir en los pequeños detalles, esas cosas que pasamos por alto y nunca agradecemos, ahí mi año agarró un sabor muy peculiar.


Ver como la desesperación por no estar como uno quiere no es cosa particular de uno mismo, sino es un temor que compartí con una mujer exitosa y tan apasionada en todo todo lo que hace que terminó haciendo sus propios muebles y le llevó meses darse cuenta que las cosas tienen que llegar cuando lo tienen que hacer.


Como no agradecer las noches que uno gasta con los amigos y sus simplezas, reír por reír, reír con lo mismo de todas la veces, los mismos juegos, los miedos que se van sumando con la edad, las parejas inconstantes que llenan nuestras pláticas de esperanza y temor, pero al final de la noche uno termina dando las gracias porque son ejemplo para seguir adelante, son seres que han crecido, han madurado han añejado sus personalidades acentuando sus virtudes y compartiendolas conmigo.


Me tocó ver caer del cielo a una mujer con tantas ganas de vida celebrando su año solo como ella lo sabe hacer: gritandole al mundo que sigue viva y que ninguna pérdida la ha dejado muda, eso en verdad no tiene precio.


Tantos detalles y tantas formas de vida, la boda de varios amigos, la separación de otros, el viaje a Cancún y el de Puebla, las citas fallidas y las que uno hubqiera querido evitar, el tragarse el orgullo y pedir un favor a quien no pensé en pedirle nada jamás, pero el jamás es un lapso muy largo y hasta un perdón a varias personas de mi pasado tuve que pedir por no tener el valor de decirles que no era lo que esperaban y no porque no sea bueno sino porque lo que las buenas intenciones no son suficientes para empezar una relación; aceptar y tener el coraje para reconocer que uno no está amando de manera correcta a la gente que nos ama incondicionalmente, reconocer que uno ha deseado mal y ha insultado más de una vez por no saber canalizar las emociones, contarle al destino que uno no es buena persona por ser elocuente al escribir, sino por querer ser mejor y no dejar de intentarlo a pesar de que hay días en que quisiera estar igual de vivo que una piedra; sí en verdad acepto que muchos días quise acompañar a mis muertos, que me llevaran con ellos porque no encontraba el brillo en el mundo para seguir en él… pero resulta que el mundo tiene sus formas de mandarnos mensajes y fue un amigo inconstante que  me dijo: la motivación viene de adentro, no del mundo exterior; todo tan fácil como eso.


Dejo esta pequeña ofrenda de 50 gramos a mi 2014 agradeciendole cada risa, abrazo, cada tristeza, cada día donde me obligaba a derrotarme, agradezco la vida de los que me rodean ya que a través de ellos vivo, con ellos crezco y de ellos me alimento.

Yo me regalo valor para aceptar los cambios, valor para tomar decisiones, valor para alcanzar mis metas, valor para vivir en donde y como yo quiero, valor para dejar ir, valor para creer y valor para ser yo y ser responsable de cada decisión tomada.

2 comentarios:

  1. Amigo te admiro por expresar de esta forma muchas cosas que varios pensamos respecto a la vida, te amo por ser tan genuino y decir de la manera más agradable; perra a quien te nace o se lo merece, por expresar tus sentimientos, por dejarnr formar parte de las hojad del libro de tu vida, te respeto por aventurarte a viajar, conocer, ser y sentir otros caminos, no conformarte y probar cosas nuevas. También reconozco tu disciplina para ejercitar tu cuerpo sin descuidar tu mente. Te leeo y sé que tu vida jamás será aburrida, por que eres un ser lleno de magia, eres tan artista(creativo e innovador) como ni tu te lo imsginas, sólo falta encontrar ese detonante que te permita aplicarlo constantemente contigo. Bienvenido a los tereintas q si tu quieres y asi lo decretas, seran igual o más interesantes que los veintes. Tq1ch

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  2. Te amo y siempre el leer tu sentir me llegan al corazón!!!!

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