domingo, mayo 14, 2017

Notas de vida para la vida


Bastó una nota de música para estár, fue voltear hacia arriba y sentirme aquí, sin importar el color del cielo, la calle de casas bonitas y las marcadas por la historia del olvido. Bastó ver a la gente para saber que soy parte de esto, sonrisas, frustración, cotidianidad, aburrimiento, desesperación, esperanza, ritmo, sueños, ganas, todo eso ajeno y a la vez también mío. 

Otra nota musical, un acordeón para soñar que viajo a lugares anhelados, donde también cabe mi aquí de ahora. 

Un acorde, para pensar en una persona, en esa persona, la persona, esa foto perfecta donde existimos o tal vez ese vuelo que tomaré, un café en la esquina de mesas en la calle, cualquier calle, una de aquí cerca o tal vez en Tajín, Italia o Australia. 

Un compás con un desierto para sentir, ese océano por ver, ese mirador para estar, un compás de ritmos conocidos: caribeños, norteños, ballenatos, zambas, tangos, otros más desconocidos, unos cuantos entrañables, algunos nostálgicos, otros melancólicos y ¿por qué no? todos alegres... para bailar, para sentir, para ser.
Ahora una voz con la nota, entendiendo que el amor no me huye, ni yo me le escondo, yo estoy aquí y tal vez él está atrás de mí o más cerca... ¿en mi? no sé, pero algo me dice que no será eterna la persecución donde al final nos habremos de encontrar.
Una acordeón para dejarme ir sobre mis pies, con ganas de bailar aquí o en donde sea, con ganas de ese baile tan ligero que parece que uno flota, el que fuere, sintiendo lo que siento ahora, contagiando a los que tengo cerca, contagiándonos de esto que se llama vida y fluir con ella, al ritmo que dicte, bajo sus reglas, pero con mi decisión y responsabilidad de seguirla, porque quiero continuar caminando, viendo, maravillándome de los días que parecen iguales sabiendo que es mi obligación y necesidad vivir los de manera distinta, de buscar  posibilidades y no monotonías. 

Ese cierre de la melodía donde todo queda en suspenso, ninguna certeza, un par de recuerdos, varios anhelos y la sonrisa traviesa que la curiosidad genera sobre la maravilla de la posibilidad.  Les Jours Tristes

1 comentario:

  1. Por que aquí seguimos, con la cicatrices que elegimos y con mucho amor de amigos y familia.
    Efra, gracias por siempre pintar de colores mi vida, por ser tal cual eres conmigo, mostrarme eso me permite desnudar mi alma también. Espero que en este camino podamos transitar siempre juntos.

    ResponderEliminar

Porque todos sentimos diferente... Comparte tu sentir.

Abrazos perdidos

Canción para leer: Camino para volver - Conchita Si los hubiera abrazado más pienso que tal vez se hubieran quedado más, no lo sé y no lo sa...